Los vampiros de la energía atacan tu casa: así puedes detenerlos
Echa un vistazo a una lista de acciones inteligentemente macabras (y prácticas) para ocuparte definitivamente de los vampiros energéticos de tu casa.
Halloween está a punto de llegar, y una banda de espeluznantes vampiros de la energía podría estar al acecho en tu casa. Por desgracia, estos aparatos electrónicos que chupan la energía no están interesados en los dulces, sino en chupar sus tomas de corriente hasta dejarlas vacías y aumentar sus facturas de energía cada mes.
Los llamados "vampiros energéticos" son aparatos que siguen consumiendo energía de las tomas de corriente, incluso cuando están apagados o inactivos. Aunque estos vampiros no le chupan la sangre, algunos de estos aparatos pueden aumentar considerablemente su consumo de energía, costándole a usted y a su familia cientos de dólares al año.
Según el Laboratorio Nacional Lawrence Berkeley del Departamento de Energía de EE.UU., un electrodoméstico que consume constantemente 1 vatio de corriente eléctrica equivale a 9kWh al año, lo que supone un coste anual de 1 dólar (básicamente 1 dólar/vatio/anual). Teniendo en cuenta el número de aparatos que se utilizan en un hogar medio, los costes pueden ascender rápidamente a 100-200 dólares al año.
Para prepararte para los meses más fríos y caros en materia de energía, hemos preparado una lista de acciones ingeniosamente macabras (y prácticas) para ocuparte definitivamente de los vampiros energéticos de tu hogar.
En el baño
No, lamentablemente colgar ajos no es el primer paso. Pero tu afeitado matutino y tu peinado pueden ser motivo de preocupación si dejas aparatos como secadores de pelo, rizadores o afeitadoras eléctricas enchufados a la pared. Incluso cuando están apagados, estos aparatos pueden absorber la electricidad de la toma de corriente y costarte dinero. Sé más inteligente que esos molestos vampiros de la energía y tira del enchufe.
Si no, los interruptores temporizados son una buena forma de encender las luces antes de llegar a casa o incluso de asegurarte de que no quemas la casa con tu rizador. Considera la posibilidad de colocar uno de estos prácticos dispositivos en tu cuarto de baño si eres olvidadizo o estás ocupado por la mañana (¿y quién no lo está?). La tranquilidad puede ser tan valiosa como el ahorro de energía.
En la cocina
Te has arreglado y estás listo para ir al trabajo, pero aún no has terminado esa cafetera. Antes de salir a trabajar, acostúmbrate a apagar todos los aparatos de cocina innecesarios, especialmente esa nueva cafetera exprés. Es cierto que las cafeteras sólo consumen entre 1 y 3 vatios cuando están apagadas, pero añádelo a tu microondas, al pequeño televisor de la cocina, al horno tostador y a otros electrodomésticos que no utilizas y podrás ahorrar entre 10 y 20 dólares al año.
En el salón
Los decodificadores de cable y los DVR más antiguos de tu salón son unos de los vampiros energéticos más temibles, ya que son menos eficientes que los modelos más nuevos. Algunos de estos aparatos consumen constantemente entre 25 y 45 vatios de energía cuando están apagados. Para mitigar este derroche de energía, conecta tu centro de entretenimiento y otros aparatos del salón a regletas o a una toma de corriente con interruptor de pared.
Así podrás apagar fácilmente todo el sistema cuando lo necesites. Pero recuerda que si piensas grabar un programa, tu caja de cable tendrá que estar encendida. Además, la guía de programas tarda en cargarse, por lo que es mejor apagar el receptor de cable sólo si no lo vas a utilizar durante mucho tiempo.
Si todavía te preocupa el uso de energía de tus decodificadores domésticos, ten en cuenta que, en diciembre de 2013, la industria, los grupos ecologistas y los consumidores llegaron a un acuerdo no reglamentario que se espera que mejore la eficiencia de los nuevos decodificadores entre un 10 y un 45% (dependiendo del tipo de decodificador) para 2017. Así que, si quieres ahorrar energía y dinero, considera llamar a tu proveedor de cable para informarte sobre estos nuevos descodificadores más eficientes.
En la oficina de casa
Puede que hayas terminado de trabajar, pero tus portátiles y PCs en la oficina de casa están contribuyendo a tu factura eléctrica. Asegúrate de mantener tus ordenadores en modo de espera si no los utilizas. Por supuesto, un ordenador de sobremesa o portátil puede seguir chupando entre 15 y 21 vatios cuando está inactivo. Apágalo y podrás ahorrar hasta 20 dólares en un solo aparato. Las impresoras de chorro de tinta y las máquinas de fax, así como otros ordenadores, pueden aumentar fácilmente estos costes, así que asegúrate de utilizar regletas y apagarlas cuando no las uses.
En el dormitorio
Los calefactores son una buena forma de mantener caliente el dormitorio del sótano. Por desgracia, también son una buena forma de provocar un incendio en la casa y de aumentar la factura de la luz. Si algunas habitaciones son más frías en su casa, considere la posibilidad de arreglar las fugas o añadir aislamiento en lugar de utilizar los costosos calefactores. Puedes encontrar formas de arreglar las fugas de tu casa con una simple auditoría energética.